Cuando nos ponemos en manos de un profesional del sistema sanitario esperamos recibir una atención de primera categoría. A fin de cuentas, estamos poniendo en sus manos el bien más preciado del que disponemos: nuestra salud. No obstante, hay que recordar que los médicos también son personas y, como tal, el riesgo de cometer un error siempre está presente. Lo cual no significa que nos tengamos que conformar con una mala asistencia: todo lo contrario, es fundamental recurrir a abogados especializados en negligencias si esto llega a suceder. De ello va a depender que la trascendencia del incidente sea lo más pequeña posible.
La importancia de la indemnización en las negligencias médicas
Un médico tiene la imperante responsabilidad de asegurar que el tratamiento que está desarrollando se ejecute con la máxima precisión posible. Si esto no ocurre así, se antoja crucial ampararse en el derecho y poner en marcha una reclamación de la mano de un buen abogado negligencia médica Madrid. Un profesional que velará por nosotros cuando el sistema sanitario falla.
Las negligencias médicas siempre derivan en secuelas de mayor o menor gravedad que van a condicionar nuestra vida de forma trascendental. Bien sea por dolores físicos, problemas psicológicos o gastos financieros inesperados, estos errores dejan un impacto directo en nuestro bienestar. De ahí que obtener una indemnización justa sea esencial, habiendo de recurrir a los grandes expertos en estos procedimientos.
Los abogados especializados en esta materia no solo saben cómo gestionar este tipo de casos para obtener las mejores condiciones en la sentencia final. Sino que también colaboran con los procuradores y peritos médicos más cualificados; quienes son figuras clave para que tanto los pacientes como sus familiares consigan esa compensación que tanto se merecen. Un apoyo de vital relevancia para uno de los momentos más delicados de toda nuestra vida.
Negligencias comunes en el sector sanitario
La mala praxis médica es más habitual de lo que nos gustaría reconocer. De hecho, se presenta en todo tipo de circunstancias y, con independencia de la gravedad del suceso, es fundamental ponerse manos a la obra para reclamar lo que nos merecemos. Ahora bien, ¿cuáles son los casos más comunes? Veamos cuál es el pan de cada día en los despachos de abogados.
La falta de prescripción de pruebas diagnósticas, la infravaloración de los síntomas, los errores en la interpretación de las pruebas de imagen o el retraso de la atención hospitalaria son algunas de las negligencias más destacadas antes incluso de la atención al paciente. Unas circunstancias que dañan en gran medida al paciente y sus perspectivas de recuperación sobre una enfermedad.
Asimismo, en lo que respecta a los propios tratamientos, las secuelas durante las intervenciones quirúrgicas, los medicamentos contraindicados, el incumplimiento de los protocolos o el uso indebido de los materiales quirúrgicos se presentan como las causas de reclamación más frecuentes. Unos cuantos ejemplos de todo cuanto puede llegar a afectar al desarrollo de nuestra vida.
Cómo trabajan los mejores abogados
Una vez analizadas las situaciones que se pueden dar en los centros hospitalarios y las clínicas sanitarias, es importante tener presente cómo trabajan los despachos de abogados. En los mejores bufetes han desarrollado métodos de gestión de lo más efectivos que garantizan una resolución impecable en todos los casos.
El primer paso es el de hacer un estudio previo con perspectiva jurídica, determinando la viabilidad de la reclamación de antemano. Si todo apunta a ser favorable, entonces los profesionales en cuestión se ponen manos a la obra para realizar una atención personalizada; quedándose así en todo momento junto a sus clientes.
A pesar de que la vía extrajudicial es la más favorable para alcanzar un buen acuerdo en la indemnización, si se ven obligados a pasar por los tribunales lo hacen con todas las de ganar. Un trabajo que concluye con la obtención de una sentencia que efectivamente plante cara a todas las secuelas sufridas a causa de la negligencia médica.