Matrix se estrenó en 1999, fue una película para los libros de récords. Con las increíbles interpretaciones de los actores Keanu Reeves y Laurence Fishbourne, los efectos especiales de última generación, las increíbles escenas de acción y una banda sonora innegablemente buena, Matrix no tardó en arrasar. Pero bajo la superficie de estos aspectos loables de la película se esconde el hecho de que la trama es francamente retorcida.
Millones de personas salieron de las salas de cine en 1999 preguntándose si el mundo en el que vivían era realmente el mundo real. Y todo ello a partir de algunas cuestiones filosóficas profundas sobre las que personas brillantes han reflexionado durante miles de años. Pero, ¿y si todos los conceptos alucinantes no fueran nada nuevo? Resulta que Matrix utilizó muchas ideas de filósofos, tanto modernos como antiguos.
Dualismo cartesiano en Matrix
El dualismo cartesiano es una teoría filosófica en la que el universo se divide en dos tipos de existencia iguales y opuestos, llamados «mente» y «materia». Desarrollado por el filósofo francés René Descartes, es una extensión directa de su filosofía del dualismo mente-cuerpo. Descartes estaba obsesionado con el punto en el que termina el cuerpo y comienza la mente.
La cuestión que se plantea es si la mente es una abstracción que existe en el universo físico o si el universo físico es una abstracción que existe en la mente. Y, usando mi mente, lo único que puedo probar realmente es el mundo mental de mi pensamiento, algo que va de la mano con el desarrollo de matrix.
La «Alegoría de la Caverna» de Platón es la base de Matrix
La «Alegoría de la Caverna» de Platón proviene de su obra La República. Comienza con una conversación entre Sócrates y Glaucón en la que discuten la idea de cómo vemos el mundo.
¿Cómo sabemos si la realidad que experimentamos es realmente real? ¿Podemos usar nuestros sentidos? Sócrates no lo cree así, y nos pide que imaginemos una cueva con gente dentro que nunca ha salido de ella. Hay un fuego en el frente y una pared en blanco en el fondo. En la pared del fondo se proyectan sombras con la luz del fuego, mostrando la actividad que ocurre fuera de la cueva, pero sólo en la sombra.
El inmaterialismo de Berkeley
Existe una escuela de pensamiento llamada inmaterialismo, que fue concebida por el filósofo irlandés George Berkeley. El inmaterialismo es la idea de que los objetos físicos no existen en un mundo propio, sino que forman parte de un todo más amplio en un mundo compuesto sólo por cosas intangibles.
Para Berkeley, el mundo no existe independientemente de la mente. En Matrix, el ordenador programaba las mentes de los personajes, pero sus mentes creaban sus experiencias, que no eran reales.
El cerebro de Gilbert Harman en una cuba, la insercción en Matrix
En un experimento mental del filósofo Gilbert Harman, un científico coloca un cerebro consciente en una cuba de nutrientes y agua y le hace creer que es un cerebro en una cuba.
A continuación, el científico estimula la cuba con electricidad y controla los cambios en el estado mental de la persona. Sin que la persona lo sepa, la intención del científico no es estudiar el cerebro, sino probar la pregunta: «¿Qué se siente al ser un cerebro en una cuba?» En un experimento, el científico estimula la cuba con electricidad y la persona siente dolor.
En otro experimento, el científico estimula la cuba con electricidad y la persona no siente nada. En otro, el científico estimula la cuba con electricidad y la persona siente una sensación de libertad. En una última prueba, el científico estimula la cuba con electricidad, y la persona tiene una sensación de confianza.
La teoría de la libertad de Kant en Matrix
El filósofo alemán Immanuel Kant dijo una vez: «Debes ser libre para convertirte en lo que eres capaz de ser». Creía que la ley moral era conocerse a sí mismo como persona libre. Para Kant, la libertad es un componente necesario de la felicidad, y la felicidad sin libertad es imposible.
Si la felicidad fuera un regalo que te diera una fuerza exterior, no sería la verdadera felicidad. Y Matrix jugó mucho con este concepto cuando nos obligó a preguntarnos si preferíamos vivir una mentira feliz o una verdad incómoda.
Cuando están conectados a la máquina, las personas son felices viviendo en las «cuevas» artificiales de sus propias mentes. Las máquinas crearon una simulación que permitía a los personajes ser felices, pero sólo a costa de la libertad.