Hombre tomando apuntes en una hoja

Constituye una sociedad sin errores con los mejores servicios de asesoría

Poner en marcha un modelo de negocio es un reto sustancial para el que no todo el mundo está preparado. De hecho, desde el primer momento en el que tomamos esta decisión ya nos vamos a dar de frente con un sinfín de barreras burocráticas. De cara a superarlas con la máxima facilidad posible, es importante delegar ciertas funciones en manos de especialistas. Momento en el que las asesorías para empresas tienen mucho que decir. Unos despachos que se convierten en nuestro faro para alumbrar el complejo camino que estamos a punto de recorrer; sabiendo que cada paso tiene una razón de ser y no tropezamos bajo ningún concepto.

Delega en asesores para empezar con buen pie

Si eres de los que se han cansado de depender de un jefe durante la jornada laboral, sin duda te habrás planteado la opción de emprender. Ahora bien, por muy prometedora que sea tu idea, no la pongas en marcha por cuenta propia. Delega desde el principio en una asesoria Malaga y así te ahorrarás muchos de los problemas que se tienden a derivar de la constitución de una sociedad.

Si no lo haces, es probable que tardes más tiempo del esperado en comenzar con tu actividad. Lo cual supone un gasto económico, impidiendo que factures cuando tenías pensado. Un gasto que igualmente se dispara en términos tributarios, ya que los impuestos por abrir una sociedad pueden reducirse en gran medida si se acude a expertos en esta materia. De ahí que las asesorías sean instituciones de obligada inversión.

Pasos que debes dar al constituir una sociedad

Como bien venimos comentando, el primer paso para constituir una sociedad de forma eficiente y rápida es recurrir a una asesoría de empresas. Estos te indicarán con qué requisitos debes cumplir en cada caso para iniciar tu negocio soñado. También gestionarán todos los trámites correspondientes, liberándote de esta tediosa labor desde el minuto uno.

En cuanto a los requisitos para constituir una sociedad limitada, encontramos cuatro diferentes. El primero es disponer de un certificado negativo de denominación social, es decir, una reserva del nombre que se va a poner a la empresa que se solicita en el Registro Mercantil. Asimismo, hay que tener un capital social de 3.000€, el cual puede ser en efectivo o en forma de aval. También es importante contar con una cuenta bancaria activa, al menos en el caso de que se porte el capital social en efectivo. Por último, encontramos el DNI o NIE de todos los socios; es decir, que tengan sus papeles en regla dentro del país. Sean españoles o extranjeros.

Con todo esto en mano, ya se podrá comenzar con todos los pasos correspondientes para constituir la SL de una vez por todas. En este orden de ideas, la asesoría para empresas se encarga de la redacción de los estatutos y la escritura pública, así como de la obtención del NIF para la empresa. También la inscribe en el Registro Mercantil provincial, la da de alta en AEAT y en la seguridad social y, a modo de extra, diseña un listado de obligaciones que debes ir cumpliendo según tu actividad.

Si haces todo esto por tu cuenta, el periodo de resolución puede superar los 20 días. No obstante, de la mano de este tipo de despachos, podemos tener la empresa completamente activa en un margen de 48 horas. Una diferencia sustancial que termina siendo un ahorro.

Déjate asesorar también en el largo plazo

Ahora bien, el asesoramiento a empresas no concluye con la apertura de la sociedad. Son muchas las piedras que podemos encontrar en el camino y es importante esquivarlas para mantener intacta la integridad financiera del negocio. Algo en lo que dichos expertos vuelven a ser de gran ayuda.

Servicios como la asesoría contable o fiscal garantizan que todos los números de la SL están intactos. Es decir, que no se cometen errores económicos de manera interna y que, de cara a Hacienda, cumplimos con todas las obligaciones tributarias. Asimismo, la asesoría laboral es la mejor forma de mantener a todos los empleados dentro de los parámetros de legalidad. Lo cual repercute en su bienestar y, por ende, en la productividad de la empresa. ¡Razones más que suficiente como para delegar en estos especialistas!